El escote es una de las zonas del cuerpo más sensuales y también más vulnerables. De cara a estas fiestas es hora de presumir de cuello y escote llegan los vestidos de fiestas, y ponerse guapa por dentro con lencería sexy. Cuidar adecuadamente esta piel tan delicada es el único camino para frenar su envejecimiento y preservar su belleza. Los últimos cosméticos y sencillos ejercicios lo hacen posible.
Tanto el cuello como el escote presentan una piel más fina, con menos glándulas sebáceas y menor cantidad de tejido adiposo y conjuntivo. Estas características favorecen la rápida aparición de arrugas y flacidez. Las líneas que aparecen en el cuello se conocen como arrugas de collar mientras que el descuelgue que se produce por la pérdida de firmeza de los tejidos da lugar a lo que se conoce como cuello de pavo. También el doble mentón o papada encuentran el lugar idóneo para instalarse bajo la barbilla con la consecuente pérdida de definición del óvalo facial. Por otro lado, el bajo nivel de melanina de la piel de esta zona propicia la aparición de manchas ya que su capacidad defensiva hacia las radiaciones ultravioletas es menor. Para evitar estos problemas y mantener la piel tersa e hidratada es necesario dedicar una mayor atención a estas zonas olvidadas.
A pesar de su fragilidad, la piel del cuello y del escote responde muy bien a los tratamientos estéticos que se le dedican. Como cuidado cosmética diaria es importante el desmaquillar la zona con productos delicados que no resequen la piel y la aplicación de productos específicos desde la barbilla hasta el nacimiento de los senos, lo que ayudará a mantener la piel suave, lisa y bonita. Como medida de precaución es imprescindible proteger la piel siempre que esté expuesta al sol para evitar la aparición de manchas. Si estas ya han surgido es el momento de iniciar un tratamiento aclarante para borrarlas. Una exfoliación suave semanal y la aplicación de mascarillas hidratantes, antiarrugas o despigmentantes, según sea el caso, completarán los cuidados en casa.
Pasar a la acción: trucos para embellecer el cuello y el escote
- El sujetador adecuado no tan solo ayuda a prevenir la flacidez de los pechos sino que también incide en mantener tersa la piel del escote.
- Mantener la espalda recta influye directamente en la belleza del cuello y del escote.
- Para tratar la flacidez, las cremas deben aplicarse con pasadas ascendentes, circulares y suaves (sin desplazar el tejido) para conseguir que los productos penetren a la vez que realizamos un masaje lifting.
- Una opción para utilizar las cremas nutritivas de noche es aplicar a modo de mascarillas, dejándolas actuar al menos durante 20 minutos, ya que son muy ricas en principios activos y por tanto, no se debe prescindir de ellas.
- Es aconsejable dormir con una almohada bajo para que el cuello permanezca tumbado mientras dormimos.
- Aplicar el maquillaje desde el rostro hacia el cuello y el escote embellece, unifica la piel y evita el efecto “máscara” que se produce si el fondo se aplica sólo hasta la barbilla.
Algunos sencillos ejercicios mejorarán la piel tanto del escote como del cuello:
- De pie con los codos junto al cuerpo, colocar un libro debajo de cada brazo. Poner los antebrazos en posición horizontal y las palmas de las manos hacia arriba. Separar los antebrazos llevándolos hacia los lados sin mover los brazos y mantener la posición durante 10 segundos. Hacer este ejercicio 10 veces seguidas.
- Juntando las manos a la altura de la nariz con los codos en posición horizontal, apretar fuerte palma contra palma sin mover los dedos. Hacer 10 veces seguidas.
- Realizar una amplia sonrisa forzado hasta notar como se contraen los músculos del cuello. Es un ejercicio que se puede hacer en cualquier momento del día.
- Poniendo una muñeca contra otra, empujar con la de arriba la de abajo que hace fuerza de resistencia. Mantener la posición 10 segundos y repetir invirtiendo las muñecas.
- De rodillas y sentada sobre los talones, inclinarse hacia delante estirando los brazos todo lo que se pueda, inspirando al subir y espirando al bajar. El rostro debe llegar a tocar el suelo. Repetir 10 veces.
- En cualquier momento del día se pueden repetir las letras X y O de forma exagerada para hacer trabajar los músculos del cuello.